El japonés tiene tres sistemas de escritura: hiragana, katakana y kanji. El hiragana y el katakana son silabarios: cada carácter representa una sílaba. Los kanji son caracteres logográficos: cada carácter representa una palabra o un concepto.
A menudo se dice que el sistema de escritura japonés es uno de los más difíciles de aprender, debido al gran número de caracteres. Sin embargo, el hiragana y el katakana no son tan difíciles como parecen a primera vista.
Sólo hay 46 caracteres básicos de hiragana y 48 de katakana. Se pueden aprender con relativa facilidad. Una vez que conozca los caracteres básicos, podrá combinarlos para formar cientos de combinaciones de sonidos diferentes.
El katakana se utiliza para las palabras de origen extranjero, mientras que el hiragana se utiliza para las palabras nativas del japonés. Los kanji se utilizan para ambas cosas. Además, el romaji (letras latinas) suele utilizarse para palabras que pueden escribirse en hiragana o katakana.
Aprender el hiragana y el katakana le proporcionará una comprensión básica del sistema de escritura japonés. Sin embargo, para poder leer y escribir con fluidez, tendrá que aprender también el kanji.